domingo, diciembre 23, 2018

No perder el control



Están pasando muchas cosas que deseaba que pasasen, y todas juntas, una detrás de otra, a final de año. Está siendo una explosión de euforia. Euforia contenida, eso sí, no me voy a flipar. Así me protejo. Yo siempre voy con la mano preparada para frenar. Creo que es inteligente. He sucumbido a la moda de los gorros. Eso sí que no es inteligente. Pero es que tengo frío en la cabeza por las mañanas cuando salgo a las siete y media en la bici. La música sigue siendo mi amor más importante y me está dando mucho. Recientemente también he conocido a una chica que me gusta (pelirroja, no sé qué me pasa este año con las pelirrojas, pero han marcado la tónica) y cuando estoy con ella aprovecho para besarla siempre que se me pasa por la cabeza que me gusta, por si acaso. Nunca se adónde llevan mis "por si acaso", son similares a la línea del infinito.




viernes, diciembre 07, 2018

Días para mí



Ayer decidí pasar el día sola. Aproveché el sol para pasear y para fichar las novedades del barrio. La perri estuvo corriendo por el parque y tratando de hacer hoyos en el césped. Luego estuve comiendo en la terraza y más tarde tocando la guitarra. Pasé un buen rato viendo videos de Tijuana Panthers, vídeos en directo. Aprendo mucho viendo tocar a los grupos que me gustan. Me fijo en detalles que empapo. He dormido en el sofá. A veces me gusta ser invitada en mi propia casa. O como si fueras a dormir a otra. Dentro de un rato saldrá el sol y lo iluminará todo.

lunes, diciembre 03, 2018

Espectro




El viernes disfruté muchísimo. La gente gritaba y hacía ruido. Me hacía ilusión tocar en ese antro hurrako... Tal vez me lo pasé tan bien porque estaba relajada. Me sentí como si fuéramos parálisis permanente y estuviéramos en los 80's. Bueno, me flipé mucho. Fui feliz. Qué más da el motivo.

Hoy ha empezado una nueva semana. Un nuevo mes. Casi un nuevo año. No me apetece en absoluto que pasen los días, que se pierdan las horas, que se gaste el tiempo. No me apetece aburrirme, pero me aburro. Me aburro muchísimo. Últimamente, algunas tardes son largas y vacías, supongo que debo volver a llenarlas de actividades para entretener la cabeza. Es algo que me pasa desde que era niña, y en la adolescencia me pasaba contínuamente, pero pensaba que en el futuro desaparecería. Ahora pienso que en el futuro será muchísimo peor. ¿No es falso entretenerse? A mí me lo parece. Puede que el aburrimiento sea una circunstancia de la vida que debamos aceptar. El aburrimiento y la soledad. Por eso, cuando aparece  algo o alguien que me lo quita, me fascina. Pero la cuestión es que no aparece  así como así, a veces no aparece nada por mucho que lo busques o lo intentes o lo propicies. Espero que mis lectores/as positivas y optimistas no se peguen un tiro, seguro que no porque seguirán creyendo en el universo y en su poder.

Debo decir que las mañanas son siempre bonitas, esperanzadoras, justo antes de salir el sol. Paso con la bici por al lado del parque de la ciutadella y siento algo parecido al amor. Pero creo que es un recuerdo.

Fue el cumpleaños de mi abuela. Estaba feliz. No quiero vivir tanto como ella.