La música sin instrumento
Las cosas que no puedo nombrar, las que no tienen límite, se llenan de intensidad.
Después del trabajo he ido a casa de unas amigas a ver el último dvd de ani difranco. Y claro, por la tarde he llegado a la facultad con unas ganas tremendas de tocar la guitarra y cantar pero me he encontrado en la pizarra "hacer una composición de 8 compases, 3/4, dos periodos, primer periodo final suspensivo, segundo periodo final conclusivo, tonalidad Mib Mayor, principio anacrúsico, final masculino".
Me he plantado delante del pentagrama con el lápiz y la goma de Milán. Pero el papel no sonaba. Lo he sacudido, lo he volcado, lo he puesto del revés y nada, que no suena. De momento, sin instrumento, no sé hacer música.
Aún así, me he puesto a repartir figuras sobre el pentagrama, un poco con ton pero sin son, queriendo imaginar la melodía y recordando ese gran día que les dije a mis padres "papá, mamá, yo paso del solfeo, yo lo que quiero es un grupo de rock"
Cuando po