Mientras el peluquero me quitaba el flequillo, ha entrado un hombre calvo. La peluquera deslizaba el peine con sumo cuidado sobre la piel. He mirado de reojo su peinado. Ha sido un momento frágil, Cocorosie sonaba de fondo. Tijeretazos brillantes y destellos de instantes contigo. Me gusta oírte en mi vida, distinguirte entre el rumor monótono y constante.
Me he comprado una mesa y un montón de bolígrafos nuevos, dicen que motiva para estudiar.
La pelu bien, pero se pasaron con el plastificado.
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