Llegan hasta aquí los gritos de la gente que hay en el bar de la esquina viendo el partido. Y yo estoy muy lejos escuchando a Anna Calvi casi en la oscuridad. No la cambio por ningún gol. Si algún GPS intentara localizarme le daría error, entraría en bucle y explotaría.
A veces es importante estar ilocalizable para que tu situación no se contamine del exterior, de los humos nocivos y de los gritos de los bárbaros.
ResponderEliminarLos covers de Anna Calvi son indescriptibles, brutalmente hipnóticos, como su guitarra.
Y acabo de recordar cómo la conocí...
Un beso, aviadora.
jajajaja bien bien! no te perdiste nada del otro mundo! besazo
ResponderEliminarAviadora, hiciste bien...¡qué demencias casi todo!
ResponderEliminarSaludos de Tita y míos.
feliç aniversari amb aquesta llum preciosa d'octubre! :-)
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