jueves, mayo 18, 2017

Tocar más




He quedado con I de Indie Lover, después de varios intentos fallidos. Pero todo llega... Lo primero que hemos hecho ha sido entrar en la tienda discos y mirar vinilos mientras íbamos comentando las portadas y se entremezclaba todo con la vida. No me iba a comprar ninguno pero al final no he podido resistirme al Live in Paris de Sleater-Kinney, supongo que porque últimamente, por una cosa o por otra, Carrie Brownstein está volviendo a  mi vida en forma de sutiles señales.  Así que le he hecho caso a la vida. Luego hemos ido a tomar unas cervezas y se estaba la mar de bien, con esa brisa de atardecer, de playa y cementerio cercano. Ha sonado Light my fire y nos hemos reído.

Todo marcha mejor que hace un par de meses, por ejemplo. Aunque, en realidad, marcha igual. Pero yo estoy de mejor humor. Estoy centrándome en mi música, en las artes marciales y en tener algo más de vida social, sin presiones.

Esta mañana, en el entrenamiento, me he dado cuenta de que las personas deberíamos tocarnos más. En el gimnasio nos tocamos mucho cuando hacemos, por ejemplo, ese ejercicio que es tratar de bloquear a alguien en el suelo y que la otra persona trate de salir y ponerse encima de ti. Siempre me toca hacerlo con chicas. Luego nos duchamos juntas y tenemos conversaciones banales con las tetas al aire y llenas de jabón. Estoy muy contenta con mi nueva incursión en las artes marciales. Qué más se puede pedir. Pero lo de tocarse no iba por ahí, me he desviado. Me refiero a que las personas nos tenemos que tocar más porque sí. Tocarse es bonito. Es cercano. Es humano. Por eso, cuando me he encontrado con I, a pesar de no habernos visto nunca antes, le he dado un abrazo. Mi nueva máxima va a ser tocar más a las personas. 






8 comentarios:

  1. Pepita Pulgarcita9:19 a. m.

    Cierto! Hay que tocarse más. Yo soy súper toquitona y cuando tengo un poco de confianza, soy la típica que te toca el brazo cuando habla. El otro día abracé a un compañero de trabajo y se quedó petrificado. Ahí comprendí que hay gente a la que no le gusta que la toquen. Y me dio cierta pena, como de desconexión humana...

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    1. jajaja Creo que en el gimnasio como te tocas porque te tienes que tocar se esfuman las intenciones de cariño o de lo que sea, y entonces es un tocarse más puro. (Qué iluminada me me despertado) Te "debo" mail. Hoy contesto.

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  2. Soy muy fan de los abrazos y de posar sutilmente mi mano en el brazo u hombro de las personas como gesto de cariño y cercanía (desde el respeto máximo y evitando el intrusismo). También soy muy fan de tocar música, qué es otra forma de acercarse a los demás y a uno mismo. Paola, ¿dónde encuentras estos grupos tan geniales?

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  3. Totalmente de acuerdo. Tocarse (con o sin compromiso... ;D) rompe barreras y escudos, nos hace sentirnos más próximos a esa persona que tenemos delante, experimentarla con otro sentido más (por tanto, completarla)... oye, pues mira qué casualidad, que ayer también fui a una tienda de discos, y me pillé el 'Raw Power' de los Stooges. Iggy Pop me parece un tipo adorable. A ver qué día quedamos tú y yo, eh...? ;)

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    1. :P yo solo toco si hay compromiso hasta el altar. xD Bromas aparte... Eres un tierno! A mí mis amigas me llamaban tender grrrl.

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    2. yo es que soy ultra ateo, y me dan alergia los altares... ;P Más tierno que el pan Bimbo sin corteza, riot-tender-grrrl!

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