Ahora que me siento feliz y nostálgica al mismo tiempo… Cuánto echo de menos Madrid por las tardes.
¿Pero qué importa? A quién le importa.
El sábado estuvimos haciéndonos fotos de grupo en el terrado. Recordé aquel año en el que todo me parecía triste (depresión) y descubrí que el terrado podía ser una puerta hacia otro momento. Pues bien, supongo que he tardado años en abrirla, pero lo conseguí.
Me alegra que vuelvas y que consigas abrir puertas que parecían destinadas a seguir cerradas... hay días que parece que todo es tristeza...
ResponderEliminarLas redes nos impulsan a estar abiertos todo el tiempo para todos, pero no siempre es necesario. Algunas veces hace bien detenerse a pensar, a recordar, a saber qué es lo que nos hace uno.
ResponderEliminarSaludos,
J.