Lana nunca tiene comida en la nevera y siempre tengo que salir a comprar. Cuando se la lleno, viene uno de sus novios surferos y se lo come todo. Luego follan sin parar y yo tengo que poner la música muy alta para no sentirme incómoda.
A veces tiene detalles tontos como dejarme una madalena para desayunar junto a una Polaroid de ella misma. A veces me deja notas con sus labios marcados. Ella lo que quiere es gustar. Es su forma de demostrar cariño, aunque lo cierto es que no me cuida en absoluto. De hecho, el primer día que me quedé en su casa, mientras bebíamos un poco de vino, dijo: "Tú eres como un cachorro de perro y yo soy una irresponsable, trataremos de adaptarnos la una a la otra. Por cierto, puedes coger toda la ropa que quieras. La droga la guardo en el primer cajón de la cocina y en el armario de arriba están los cereales. Si necesitas algo y no estoy en casa me mandas un wasap."
Ayer hizo albóndigas con tomate. Es lo único que sabe cocinar.
El surfero |
No me parece mala compañía ;)
ResponderEliminarno te creas, lana es muy suya
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ResponderEliminarJajajajaja... me ha recordado mis tiempos de piso compartido.
y me alegro de que ella(s) no tenga(n) blog para contar la manía de poner post-it por cualquier cosa cuando estaba(n) en casa y sentía urgencia de que supieran si les había robado un yogur...jajaja o que justo el último año me enterara de que teníamos batidora (a pesar de llevar tres años celebrando los 'miércoles-creperos' ^^
jajajaja ais
Yo sólo he tenido una compañera depiso y nos llevábamos muy bien, además era una convivencia muy intensa... estábamos juntas en clase, en la calle, en el piso. En fin, bonitos recuerdos!
EliminarQué suerte.
ResponderEliminarLa ropa, la música, y la magdalena. Entrañable personaje.
Hoy no se ha pasado por casa todavía.
EliminarPao, ¡sal de ahí!
ResponderEliminarNo puedorl.
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